TAMBIÉN TÚ

TAMBIÉN TÚ Me interno en el bosque. La luna brilla lejana: hambre de ti tengo, infinita como los guijarros que piso. Ciento cuarenta y seis hectómetros cúbicos de lágrimas, sepultan recuerdos de café caliente como tu piel. El reflejo de la luna desde el abismo mira cielos de keroxeno, tóxicos y bellos como nuestra agonía. Raúl Sánchez Alegría 30 de noviembre de 2020